Aunque el panorama era de por sí bastante entretenido, pensé en divertirme un poco más mientras me llegaba el turno. En las revistas, veo muchas fotos de las casas de los famosos. Funerales, bodas de alto copete, embarazos muy deseados. En una encuentro un Sudoku ya empezado (y veo con cierto disgusto que está mal). Pero busco y busco…¿Dónde están los Test psicológicos?
En mis tiempos jóvenes (más jóvenes que ahora que siguen siendo jóvenes), en toda revista que se preciara, además del horóscopo y algún crucigrama, aparecía un Test psicológico del estilo de: ¿Es tu pareja perfecta para ti? O bien “Descubre tu verdadero carácter”.
Como tuvieras un boli a mano, ya estabas rellenando casillas y contando los puntos A, B ó C, para descubrir el sentido de la vida. Pero ya no hay Test en las revistas. O por lo menos, no hay en las revistas que compra la Nati.
Esto me ha llevado a meditar profundamente sobre el tema. Qué maravilloso sería averiguar, realizando un simple Test, en unos pocos minutos, lo que el destino tiene reservado para ti, si tu pareja te sigue siendo fiel. Si tú eres una persona normal o tienes alguna patología. Si tus amigas te ven como realmente eres. Si tu vecino es en realidad un asesino en serie.
Recuerdo que en el cole, cuando tenía unos 7 u 8 años, vinieron unos psicólogos a hacernos pruebas. Me acuerdo que nos hicieron el “Test del árbol” y otro de dibujar a la familia. A mí me hizo ilusión, porque lo veía como muy científico todo. Llamaron a mis padres y les debieron de decir que yo era bastante lista para mi edad, porque, aunque yo no estaba delante, siempre tenía las antenas puestas y algo oí, y al día siguiente la monja me sonreía y me acariciaba la cabeza. Al año siguiente nos volvieron a hacer las mismas pruebas, pero ya no llamaron a mis padres. Supongo que en aquel año mi inteligencia se terminó por asentar y me normalicé. O me fui al garete. En fin, para qué voy a especular sobre algo que jamás sabré a ciencia cierta y con lo que tendré que bregar el resto de mi vida.
También me acuerdo de ciertos Test que tuvimos que pasar hace unos años en Bienestar Social para acompañar una solicitud. A mi me salió que soy asertiva, responsable, un poco rígida. Una borde, vamos. A M. en cambio le adornan todas las virtudes del mundo. El caso es que nos declararon idóneos a pesar de mi bordería. Las bondades de mi marido hicieron contrapeso.
El caso es que busco información sobre Test de todo tipo. Y encuentro mucha.
Desde los test de inteligencia: http://www.psicoactiva.com/tests/testci.htm (¡en este he sacado un 137, lo que quiere decir que no está todo perdido!), Test de autoescuela: http://www.todotest.com/tests/idxtests.asp (anda que si me tuviera que examinar otra vez…), Test de ovulación (este ahora no me interesa mucho), y Test de amor: http://amor.rincondelvago.com/tests/ (Ja jaraja! ¡estos son la bomba!) .
A parte de todo esto tan interesante, me entero que todavía hay muchas empresas que hacen Test a los candidatos a ocupar un puesto de trabajo, y además de las entrevistas personales, utilizan Test para descartar a los que consideran que tienen un perfil poco deseable. Los más usados con este fin, son el Test de Rorschach y el Test de la persona bajo la lluvia, asi que voy a tratar de explicar de qué van.
El Test de Rorschach.
Este Test se lo inventó un suizo que se llamaba Hermann Rorschach.
Estudió psiquiatría con el mismísimo Carl Gustav Jung, y en 1921, publicó un libro llamado “Psychodiagnostik” en el que contaba sus experiencias con las manchas de tinta.
Se trasformó en el primer método de exploración de la personalidad de importante valor diagnóstico.
Seguro que habéis visto este Test en películas o por lo menos habréis oído hablar de él.
Consiste en una serie de 10 láminas que presentan manchas de tinta. Estas manchas se construyeron doblando una hoja de papel por la mitad, echando previamente un poco de tinta en medio, claro. Al desdoblar la hoja, aparecen una serie de imágenes ambiguas, con cierta simetría. El psicólogo le pide al sujeto que haga una interpretación de las manchas. Es como cuando tratamos de adivinar figuras en las nubes. A partir de las respuestas, el especialista puede hacer una valoración del funcionamiento psíquico del sujeto examinado.
Como cada psicólogo o psiquiatra valoraba las respuestas según su criterio, otro psiquiatra llamado John Exner, creó el "Sistema Comprehensivo", contrastando resultados y creando una impresionante base de datos en base a la cual (valga la rebuznancia) poder interpretar los misterios de la psiquis humana.
Además de la interpretación de las manchas, se tiene en cuenta el tiempo que tarda el individuo en responder, dónde ve la imagen (en la mancha completa, en un detalle, en el espacio en blanco), la riqueza de los detalles, si aprecia o no movimiento, el color…
Este Test tiene grandes detractores y entusiastas promotores. Existe un programa llamado Siglaror que contiene una base de datos con más de 23.000 interpretaciones distintas, localizadas y codificadas con frecuencia estadística sobre una muestra representativa de la población adulta normal, aunque es imprescindible que el estudio lo haga un psicólogo experimentado, porque sino los especialistas se irían a engrosar las filas del paro, que ya están suficientemente engrosadas de por sí.
El caso es que, aunque pueda parecer disparatado, su importancia es innegable. Aquí están las 10 láminas por orden de presentación junto a las respuestas más frecuentes y varias interpretaciones encontradas en Internet:
Lámina 1: mariposa, murciélago, polilla, persona con las manos levantadas. La rapidez de respuesta en esta primera lámina es importante, ya que indica cómo reacciona el individuo ante situaciones nuevas. Lo mejor son las respuestas obvias, dadas enseguida. Es mejor no comentar que a lo que veas le falta la cabeza. Algunas interpretaciones raras (máscara, cara de animal) pueden sugerir paranoia. | |
Lámina 2: Dos payasos, dos perros tocándose la nariz. Es óptimo ver en esta mancha dos figuras humanas (mujeres o payasos). Si no, uno tiene problemas en su relación con la gente. También es importante si las zonas rojas son consideradas como sangre. Puede indicar agresividad. | |
Lámina 3: Personas jugando a los bolos, mujeres lavando o cocinando. Se supone que detecta las preferencias sexuales o cómo el sujeto interacciona con otras personas. | |
Lámina 4: Hombre sentado en un tronco cortado, botas, mapa de Italia, monstruo. ¡Ojo con decir que el monstruo está atacando! Es fatal: representa al propio padre. Actitud hacia los hombres o la autoridad. | |
Lámina 5: Murciélago (respuesta dada por hombres), mariposa (respuesta dada por mujeres). Ver las prolongaciones de las alas como bocas de cocodrilo significa hostilidad, ver pies o tijeras indica castración. Si se dan demasiadas interpretaciones... ¡esquizofrenia! Y también si se ve gente moviéndose. | |
Lámina 6: pierna de persona o pata de animal (interior lateral), tótem, insecto, piel de animal. En conjunto, parece que revela las actitudes inconscientes hacia la sexualidad. | |
Lámina 7: Dos cabezas de mujer o niños, conejos o perros saltando. Revela nada menos que los sentimientos hacia la madre. El espacio entre las dos mitades puede ser también interpretado como una lámpara de aceite, pero sólo los esquizofrénicos lo ven. | |
Lámina 8: Topos, osos, animales, mariposa, espina dorsal. La respuesta más corriente la relaciona con animales de cuatro patas, y no verlos es una mala señal: ansiedad. | |
Lámina 9: Fuente con luces, cabeza de reno con cuernos, cabeza de cabra con bigotes. Puede indicar problemas para lidiar con datos no estructurados. Supongo que en esta lámina se trata de “sonsacar” al sujeto para ver si dice algo interesante. | |
Lámina 10: Pulpo, cangrejos, araña (zona azul), cabezas de animales… Esta última mancha escudriña la capacidad organizativa. Aquí puede haber de todo: cangrejos, la cabeza de un conejo, huevos fritos. Buena respuesta: algo visto a través del microscopio. |
El Test de la persona bajo la lluvia.
Se supone que este Test permite obtener la semblanza del sujeto en condiciones poco agradables, cómo reacciona ante los problemas de la vida, cómo se defiende en condiciones adversas.
La consigna consiste, simplemente, en solicitarle que "dibuje una persona bajo la lluvia".
En la medida en que lo necesite, se tranquiliza al sujeto comentándole que no se busca evaluar la calidad del dibujo y que, haga lo que haga, estará bien.
No se deben dar más indicaciones, sólo alentarlo a que haga el dibujo lo mejor posible y como lo desee. Tampoco se establece un tiempo determinado para completarlo.
Mientras realiza el dibujo, se registrará la actitud del entrevistado, los comentarios que realiza, si toma muy poco o demasiado tiempo para llevar a cabo la consigna y todo dato que resulte llamativo.
En líneas generales, los elementos básicos para la evaluación son los siguientes:
Dimensiones del dibujo y emplazamiento en el papel:
Si el dibujo es pequeño puede ser señal de introversión, timidez o inseguridad.
El dibujo grande puede indicar necesidad de ser reconocido y una cierta agresividad.
El dibujo muy grande inadecuación, conflictos internos, megalomanía.
El dibujo mediano correspondería a una persona bien ubicada en el espacio.
En cuanto al emplazamiento de la imagen: si se acerca al margen derecho, que representa el futuro, se trata de una persona extrovertida, con inclinación hacia lo social. Si se acerca al margen izquierdo, que representa el pasado, puede significar debilidad, asuntos pendientes de resolver, timidez, traumas. El margen superior indica rasgos eufóricos, alegres, espiritualidad. El margen inferior reacciones instintivas, falta de imaginación, depresión, debilidad, dependencias o adicciones. En el centro de la hoja, equilibrio, objetividad y control de sí mismo.
Trazos y presión:
Línea armónica, entera y firme: persona sana.
Línea entrecortada: ansiedad, inseguridad, estrés.
Línea redondeada o curva: rasgos femeninos. Sentido estético. Dependencia. Espíritu maternal. Conciliador, diplomático, afectivo y sensible.
Líneas tirantes: tensión.
Líneas rotas, desconectadas o esbozadas: ansiedad, timidez, falta de confianza en sí mismo. Enfermedad orgánica. Tendencias psicóticas. Dispersión.
Líneas rectas: fuerza, vitalidad, razonador, frialdad, lógica, capacidad de análisis.
Líneas con ondulaciones o temblores: tensión, ansiedad. Angustia, adicción. Persona de avanzada edad. Líneas con ganchos, ángulos o picos: agresividad, impaciencia, vitalidad, independencia. Dureza, tenacidad, obstinación.
Líneas con ángulos muy agudos: excesiva reacción emocional, hiperemotivo.
Líneas en zig-zag: imposibilidad de controlar impulsos. Descontrolado. Agresividad violenta.
Líneas pegadas al papel (sin levantar el lápiz) y formando puntas: rasgo epileptoide.
Líneas circulares con adornos: Narcisismo.
Líneas curvas que se rectangularizan: no se permiten emociones, bloqueo afectivo, supresión de afectos.
Presión débil: cuando el trazo es ejecutado con velocidad y simplificación representa rapidez mental, originalidad, agilidad, intuición, hipersensibilidad, poco contraste, creativo, vehemente. Si por el contrario es ejecutado con lentitud representa ansiedad, timidez, ocultamiento, falta de sinceridad, desubicación, rasgos depresivos.
Presión fuerte: fuerza física, energía vital, seguridad, extraversión, agresión, liderazgo. Sensualidad.
Presión muy fuerte: agresividad.
Presión normal: equilibrio, constancia, armonía.
Tiempo:
Dificultad para comenzar el dibujo: excusas, disculpas, dificultades para comenzar tareas nuevas o tomar decisiones.
Dificultad para terminar y entregar el dibujo: dependencia, superficialidad.
Momentos de quietud: lagunas, bloqueos.
Ejecución lenta: pobreza intelectual, falta de imaginación.
Ejecución rápida: agilidad, excitabilidad. Ejecución precipitada: descuido, hipersensibilidad.
Velocidad normal: espontaneidad y continuidad.
Secuencia:
Proporciona el grado de orientación en el espacio, cómo resuelve conflictos y cómo organiza su vida. Por ejemplo: comenzar por los pies y a partir de ahí armar el dibujo, indica perturbación del pensamiento, no toma el camino adecuado para la resolución del problema. Comenzar por el paraguas, indica excesiva defensa y control. Lo esperable es que comience por la cabeza, continúe por el cuerpo y concluya con el paraguas y la lluvia.
Movimiento:
La rigidez indica que percibe el entorno como una amenaza, inadaptación, temor, falta de libertad.
Cuando el dibujo presenta mucha actividad exceso de fantasía.
La posición de caminar (izquierda o derecha) se interpreta según hacia dónde se dirige.
Realizando una acción concreta (deporte o cualquier otra) se interpreta como persona eufórica y energética. Si la figura aparece exhibiéndose indica narcisismo.
Sombreados:
Ansiedad por el cuerpo según la zona que señalen. Mecanismos de defensa.
Orientación de la figura:
Hacia la derecha indica avance hacia el futuro, buena relación con el padre o la autoridad.
Hacia la izquierda retroceso al pasado. Conflictos del pasado sin resolver. Quizá conflictos con la madre.
Hacia el frente indica una buena disposición para afrontar la vida.
Cuando la orientación es dubitativa indica falta de decisión y obsesiones.
Cuando la figura está de perfil, indica evasión.
Si está de espaldas, ocultamiento, depresión, deseo de no ser controlado y de pasar inadvertido.
La figura vista desde arriba indica sentimiento de superioridad, persona que juzga.
Cuando la figura está como vista desde lejos indica sentimientos de inferioridad, complejos.
La figura inclinada indica inestabilidad. Si está inconclusa desgana, apatía y depresión.
Posturas:
La figura sentada indica tranquilidad y diplomacia, pero también falta de pasión y represión.
La figura acostada muestra escasa vitalidad y falta de esperanza.
La figura arrodillada sumisión, masoquismo y resignación.
Detalles y accesorios:
La escasez de detalles implica sensación de vacío, depresión.
Detalles excesivos se observan en sujetos maníacos y obsesivos-compulsivos.
Detalles minuciosos en los controladores y obsesivos.
Ejecución demasiado perfecta del dibujo, indica temor a desorganizarse.
Una rica fantasía tiende a agregar detalles, tales como árboles, casa, paisaje, etc.
Las personas depresivas se caracterizan por la escasez de detalles y, a veces, por no completar el dibujo.
Gafas: en la persona que no las usa habitualmente, indica ocultamiento, curiosidad sexual, y voyeurismo.
Bastón o pipa: fantasías sexuales.
El dibujo de varias figuras muestra necesidad de apoyo.
Cuando la figura está cerrada entre líneas indica bloqueos y rasgos obsesivos.
En líneas generales, los objetos inanimados y adornos significan obstáculos. Debe analizarse la ubicación de los mismos.
El paisaje:
Las nubes a veces representan figuras parentales. Presión o amenaza. Pueden mostrar tendencias autoagresivas.
Los rayos también significan presiones.
Los charcos de agua representan acontecimientos traumáticos ocurridos en los primeros años de vida. Sufrimiento.
El sol o la luna representan autoridad y control.
Los animales acompañando a la figura simbolizan dependencia, necesidad de protección y sentimiento de soledad.
Los árboles, plantas y flores pueden suponer obstáculos.
La lluvia:
Representa la hostilidad del medio al que debe enfrentarse el sujeto. Por ello, cuando la lluvia es torrencial, simboliza situaciones muy estresantes, de agobio. Sin embargo, si la lluvia es escasa, el individuo se siente preparado para afrontar la presión ambiental.
La lluvia representada en forma de gotas como lágrimas indica angustia.
Cuando no aparece la lluvia puede tratarse de un individuo manipulador, que tergiversa los conflictos y tiene tendencia a negarlos.
Cuando la lluvia aparece en un solo lugar se debe analizar el lugar donde la sitúa.
El paraguas:
El paraguas es el instrumento del que se sirve el sujeto para defenderse de las agresiones del entorno.
Así, la ausencia de este elemento viene a significar falta de defensas, implica que es una persona que se defiende con su cuerpo, que "apechuga", que se expone y corre riesgos.
Un paraguas que cubre adecuadamente a la persona indica defensas sanas, sentimiento de adecuación, confianza en sí mismo, seguridad.
Cuando el paraguas es excesivamente grande en relación a la figura simboliza un exceso de defensa. Por el contrario, cuando es paraguas es demasiado pequeño, la persona queda expuesta a las presiones. Ambas representaciones son señal de conflicto en las relaciones interpersonales o con la autoridad.
El paraguas hacia la derecha puede indicar temor a lo social, al padre o a la autoridad.
El paraguas hacia la izquierda es una defensa hacia la figura materna o un intento de control de los impulsos infantiles.
El paraguas cubriendo media cabeza indica retraimiento, escape, ocultamiento, recorte de la percepción.
El paraguas “volando” indica preocupaciones.
Un paraguas cerrado resignación y falta de fuerzas. Si además de cerrado está en el suelo, significa una falta de energía casi total, e incluso una enfermedad terminal.
Cuando el paraguas y las nubes están como “fusionados” indica contaminación e ideas confusas. Lo mismo si el paraguas aparece como sombrero.
Un paraguas con agujeros indica enfermedades. Lo mismo si el paraguas tiene dibujos.
El paraguas tipo “lanza” significa agresividad.
Si se remarcan mucho las varillas puede indicar tendencia a la mentira.
Si en vez de paraguas se dibujan aleros o techos puede ser que el sujeto tenga una actitud dependiente, que busca que otros solucionen sus problemas.
Cuando la figura aparece detrás de una ventana o dentro de una caverna significa falta de compromiso, dependencia materna o pasividad.
Vestimenta:
Bolsillos: sentimiento de culpa, conflicto interior.
Botones: inmadurez, dependencia, carácter obsesivo, preocupación por lo social, preocupación somática. Un solo botón: apego al vínculo materno.
Botas: Sobre comprensión, reafirmación de las decisiones.
Detalles de la ropa sin terminar: sentimientos de inadecuación.
Corbatas: signo sexual. Debilidad.
Zapatos: muy marcados, conflicto sexual. Con cordones: impulsos sexuales. Frecuente en adolescentes. Cuando son puntiagudos indican agresión.
El cuerpo:
La cabeza: debe ser lo primero que se dibuje. Es la localización del yo. Centro de todos los estímulos. Poder intelectual, poder social o dominio.
Si dibuja en primer término las piernas y los pies, indica desaliento, depresión.
Cuando sólo se dibuja la cabeza es señal de disociación cuerpo-mente.
Una cabeza demasiado grande indica deseo de poder, vanidad, narcisismo, autoexigencia, dificultades para el aprendizaje. También perseveración en las ideas.
La cara: es el contacto social, lo que se muestra.
Sin dibujo de rasgos: desconocimiento de sí mismo, problemas de identidad.
Los ojos: sin pupilas indican inmadurez emocional, egocentrismo. Negación de sí mismo o del mundo. Dependencia materna. Vaciedad.
Cuando los ojos son muy marcados: rasgos paranoides.
Los ojos bizcos pueden significar rebeldía, hostilidad hacia los demás.
Ojos cerrados: narcisismo.
Ojos como puntos: inseguridad.
Ojos en “V”: agresión.
Las cejas: muy marcadas indican agresividad. Igualmente ocurre con otros rasgos como la nariz.
La boca: una sola línea recta puede indicar tendencias verbales agresivas.
Si la línea es cóncava significa pasividad y complacencia.
La línea convexa indica amargura.
La boca abierta: dificultades.
Los labios muy marcados significan dependencia, y los labios pintados femineidad.
Si aparecen dientes son síntoma de agresividad y conflictos sexuales.
Orejas importantes: preocupación por críticas y opiniones de otros. Puede reflejar deficiencia en la audición, alucinaciones auditivas.
El cuello es la parte del cuerpo que coordina lo que se siente -cuerpo- con lo que se piensa -cabeza-. Puede dar sensación de comodidad y confianza.
Cuando el cuello es estrecho indica depresión.
Si es grueso sensación de inmovilidad.
Un cuello largo arrogancia y desarmonía.
La representación de cabello en la figura indica potencia sexual, vitalidad. Signo de virilidad, de apasionamiento y seducción.
Cuando el cabello está “de punta” indica agresividad.
En cuanto a la forma del cuerpo de la figura:
El cuerpo cuadrado indica primitivismo y debilidad mental.
Si es estrecho disconformidad y conflicto con el propio esquema corporal. En algunos casos, astigmatismo.
El dibujo del cuerpo “con palotes” es un signo de evasión. También falta de compromiso y no darse a conocer.
Hombros anchos: fachada de seguridad, sobre compensación de sentimientos de inseguridad o inadaptación. Carácter dominante, autoritario.
Asimetría de extremidades: impulsividad, coordinación pobre. Falta de equilibrio.
Los brazos largos indican ambición.
Los brazos cortos o inexistentes pueden indicar retracción de la libido o tendencia al hurto. También esquizofrenia y depresión.
Los brazos pegados al cuerpo indican dificultad para contactar. Reserva, retraimiento, control excesivo sobre los impulsos. Falta de adaptación.
Las manos ocultas o inexistentes significan evasión ante los problemas.
Si están enguantadas son un indicador de control. Frecuente en adolescentes. Disimulo.
Los pies son un símbolo sexual. Cuando no se dibujan puede indicar desaliento, abatimiento, falta de ilusión. Tristeza, resignación. Es el que "no llega nunca". Falta de confianza en sí mismo. Inseguridad.
Las piernas largas indican independencia y autonomía.
Las piernas rechonchas sentimientos de inmovilidad.
Dibujar una doble línea de apoyo bajo los pies es un signo de obsesividad. Puede simbolizar algún acontecimiento ocurrido en la infancia que quedó marcado. Exagerada necesidad de apoyo.
Y por último, cuando la figura es alta y esbelta indica deseo de sobresalir, de mejorar. Orgullo, vanidad, soberbia. Y cuando la figura presenta mucha musculatura indica narcisismo.
Bueno, espero que esta entrada no haya resultado aburrida. Mi intención es proponerla como juego intrascendente, teniendo en cuenta que los verdaderos especialistas, psicólogos y psiquiatras, son los que están capacitados para valorar este tipo de cosas que al resto de los mortales nos dejan perplejos e inquietos, sobre todo cuando estamos aspirando a un puesto de trabajo o a algo que es importante para nosotros.